Nuestros errores
En internet podéis encontrar muchas pautas y consejos acerca de cómo quitar el pañal de vuestro niño. Yo os dejo en este post con los errores que hemos cometido, por si os sirven de ayuda cuando llegue el momento…
No le quitéis el pañal en verano. Ya, ya sé. Tooodo el mundo dice que lo mejor es esperar al verano. ¡Ja! El verano es mejor para los padres porque tienen que lavar menos ropa, pero peor para los niños. En verano, las rutinas se van al garate y lo mejor para ayudar al bebé a controlar los esfínteres es tener una rutina clara en casa. Por ejemplo, la primera vez que le quité a Emma el pañal fue en agosto, justo una semana antes de nuestras vacaciones en Berlin. Veamos, ¿cómo le explicas a un bebé que después de haber ido tan feliz sin pañal ahora tiene que volver a ponerse en sus genitales ese plástico que le hace sudar y abulta tanto porque no estaremos en casa en todo el día? Pues muy malamente. Además, después de agosto llega septiembre, justo el inicio del curso escolar (si tu hijo acude a la escuela infantil). Otro cambio de rutina. Si aún así escogéis el mes de agosto para retirar el pañal, tened en cuenta que a veces un mes entero no es tiempo suficiente para dominar el arte de hacer pipí y caca como mamá y papá.
No os mudéis de casa. Efectivamente, cometimos todas las imprudencias del mundo: nos fuimos de vacaciones, luego empezó en la escuela infantil, nos cambiamos de un piso a un caserío, dejamos la ciudad por el campo y cambiamos a Emma de escuela infantil. ¿Cuál fue la respuesta de Emma? Durante un mes practicó el pipí-protesta. ¿Qué no me haces caso? Pues me meo aquí. Hubo días en que la cambiaba tres veces de ropa. Sin exagerar.
Si tiene diarrea, ponle otra vez el pañal. Ya sé que aconsejan retirar el pañal del todo una vez se quita. ¡Pamplinas! En octubre Emma se hizo una caca líquida encima tan grande y tan asquerosa que le cogió miedo a hacer caca, por lo que se pasó dos semanas estreñida.
Cuando tiene tos, ponle el pañal otra vez. Por la noche, la tos coge fuerza y las fugas de pis son habituales. Fue en diciembre cuando descubrimos las maravillosas braguitas-pañal que seguimos utilizando ahora. Ese mes Emma estuvo enferma ocho o nueve días y a la pobre le costaba controlar los escapes. Con las braguitas-pañal solucionamos el tema. Algún día las retiraremos, pero no hay prisa. Casi siempre se levanta seca, pero así me siento más segura y duermo más profundamente sin estar pendiente de si ha tenido algún accidente nocturno.
Y lo más importante de todo: escucha a tu hijo. Muchos dicen que hay que esperar a los dos años para empezar con la retirada del pañal porque antes no están preparados para controlar el esfínter. ¿De verdad? A mi me parece una frase de marketing perfecta de parte de las compañías de pañales que ha calado tan bien en nuestra sociedad que todo el mundo repite como un mantra. Como cuando en la década de los setenta las grandes empresas de alimentación infantil se encargaron de esparcir la idea de que los biberones eran mejores que la leche materna. Cada niño es un mundo y cuando el tuyo empieza a ser consciente de que está haciendo pis, quiere hacer pis o ya ha hecho pipi, probablemente ahí ha llegado el momento de trabajar en la retirada del pañal. Porque si desoyes su desarrollo quizá cuando llegue el día en que tú quieras quitarle el pañal será demasiado tarde y tu renacuajo te dirá que tururú, que él se queda con el pañal en el culete.
¡Ah! Compra un reductor de WC. Así harán pipí y caca como mamá y papá. La imitación probablemente es el mejor modo para despedirse del pañal…
¿Que cuánto tiempo hemos necesitado Emma y yo para dejar de comprar y usar pañales? Cuatro meses. De agosto a diciembre. Todos ellos meses repletos de malas fechas y con múltiples interrupciones. ¿Podría prescindir del pañal por la noche? Sí, podría, pero alguna vez se ha meado encima y el ácido de la orina le ha dejado manchas en la piel (irritaciones) que le han durado días (cuando le salen los dientes segrega muchos ácidos que expulsa a través del pis y las heces).
¿Qué cuánto tiempo calculo que habría sido necesario sin todos los contratiempos mencionados anteriormente? Unos dos meses.
¿Cuánto tardó tu hijo en controlar el esfínter? ¿Qué trucos podrías dar a otras madres?
En la imagen, el reductor de Emma y las braguitas-pañal que utilizamos de noche.

qué trabajo nos espera!! Rubén lleva tiempo que avisa cuando va a hacer caca, pero no le gusta sentarse en la sillita, la señala y dice «tita pipí» (sillita del pipí) pero cuando lo voy a sentar protesta mucho y no hay manera de sentarlo y acaba haciendo el pipí en el suelo (algo es algo) y le digo «bieeeen, la próxima vez en la sillita». Hace dos días le compré un adaptador y estoy intentando que pierda el miedo a sentarse recalcándole que así lo hacen papá y mamá.
Precisamente hoy he visto esto
http://www.bebesymas.com/compras-para-bebes-y-ninos/un-orinal-con-soporte-para-el-ipad-sin-miedo-a-las-salpicaduras
y me he quedado sin palabras ¿funcionará? ¿lo usará alguien? de momento, mi truco es la paciencia, ah, y nunca he tenido la intención de esperar al verano, como tú bien dices hay que escuchar al niño y ya lleva tiempo anunciando sus intenciones (ahora tiene 17 meses). ¿Algún truco para que se siente sin miedo? besos
¡Qué fuerte! Y supongo que alguien lo comprará…
A nosotras el único truco que nos funcionó para perder el miedo fue ver a los otros niños de la guardería utilizando el orinal y el baño. El curso pasado, cuando Emma iba con los de su edad, ya veía a los mayores utilizando el orinal en el patio, por ejemplo. Y cuando empezó el nuevo curso con los mayores (entre dos y tres años), todavía vio a más nenes haciendo pis y caca. Creo que realmente eso es lo que ha funcionado en ella. Porque después de diarrea y el susto al ver toda aquella caca bajando por sus piernas le cogió un miedo terrible. Pero, en fin, como la pobre no puede estar sin hacer caca, después de dos largas y duras semanas decidió hacer caca en el wáter. A veces creo que no les podemos influir ni convencer tanto como a nosotros nos gustaría. Que hay que esperar a que su cerebro haga clack y cambien de chip.
¡Siento no ser de más ayuda!
Muas!!!
Si el niñ@ protesta mucho a la hora de sentarse en el orinal o en el baño es que todavía no esta preparado para hacerlo…. Aunque a veces aparzcan algunas señales q parecen indicarnos q ya seria capaz si no se siente agusto a la hora de la verdad suele ser mejor no forzara situación. Y realmente, aunque todo lo que cuentas en ti post es cierto y estoy de acuerdo, siempre digo que hasta los dos años los niñ@s no están emocionalmente preparados para semejante cambio. Es mas bien un tema de desarrollo emocional mas que un tema físico. Pueden aparecer señales pero a partir de los dos años es cuando realmente se puede empezar a trabajar con la seguridad de que el niño es consciente de lo que ocurre durante ese proceso sin sustos y malos ratos. De todos modos y como tu dices cada niñ@ es un mundo y en algunos casos, si las circunstancias son las adecuadas no digo que no se pueda conseguir, solo que el proceso tal vez sea mas duro para el niño. No se, Aritz ya ha empezado a usar el orinal pero ni me planteo todavía quitarle el pañal, ya iremos viendo. Me encanta haber retomado la lectura del blog, por cierto. Y Emma esta hecha ya toda una señorita. Un besote!
Gessamí,gracias por compartir tus consejos y trucos!a pesar que no comento muy a menudo sigo enganchadísima a tu blog.Recuerdo lo bien que me sentó leer tus andanzas de madre primeriza cuando yo me estrené de mamá.
Emma esta guapísima y se nota lo felíz que es.
Un abrazo!
Pao
Eres la caña Gessamí!!!
Como siempre, ante cualquier cambio evolutivo o situación nueva con la nena, acudo aquí y siempre encuentro respuestas…
Estamos en estas ahora, sus primeros pises sin pañal…de momento teníamos un orinal (como el de Emma, je, je…os copiamos todo). Pero en la guarde me recomiendan mejor un reductor de wc y como no, vuelvo a encontrar aquí ideas…mil gracias!
Lo único que me despista un poco es el sistema que tienen en esta escuela. Sin ningún acercamiento previo (en casa si lo ha pedido alguna vez pero allí no) marcan un día para comenzar con la retirada de pañal a saco.
En fin…a ver que tal se nos da.
Un abrazo!!!
Uouuu! Mil gracias, Sandra! Y estoy de acuerdo: si volviera a empezar, lo haría directamente con el reductor. El orinal apenas lo usamos… Y lo del acercamiento, bueno, ellos nos ven ir al baño todos los días, ¿qué mejor acercamiento que ese? 😉
Suerte y a por ello!!!!
Un besazo!
Holaaa, q buena lista de q no hacer, jajaa. Mi niña tb se llama Emma y llevamos desde el 1 de septiembre con la operación pañal. No va a la guarde asi q me toca vigilarla y cambiarla a la minima. Tardó una semana en pedir bien el pipi pero la caca sigue siendo batalla perdida. Y cuando se enfada hace pipi encima. Ya no se que probar. Al principio era tolerante, luego pase al enfado por frustracion y ahora con castigos del tipo, te quedas sin dibujos o sin tu muñeca. Pero nada. Q me aconsejais?? Hasta ha visto a sus vecinitas que ya piden todo y son d la misma edad hacerlo en el orinal (ella usa reductor pq no queria hacerla pasar por el cambio de orinal a water)
Buf! He conocido ya unos cuantos casos como el tuyo. Las cacas imponen… Y la verdad es que las familias no han encontrado una solución, y sí mucha desesperación por el camino. Sólo tiempo al tiempo… ¡Ah! Hay unas braguetas y calzoncillos especiales para estos momentos de transición: no son un pañal pero tampoco son tan finas como la ropa interior. El objetivo es que se mojen (o caguen) y vayan mojados y cagados un buen rato, que se sientan incómodos con sus cosas. Hasta que decidan dar el paso de pedir ir al baño y no hacérselo encima.
Suerte y un abrazo!
Muchas gracias por contestar, que rápida. jajaja. Ahora mismo la tengo cantandole a su padre en el salón.
Abrazos!
En mi casa estamos en pleno proceso de quitar pañal, pero tuvimos claro que llegaría de forma natural (es decir, por decisión de la peque) y así fue. En nuestro caso, yo no tengo trabajo rutinario (soy freelance) y mi trabajo actual, fijo y seguro de 24 hs es ocuparme de mi retoño de 2’5 años. Aprovechando el inicio del calor, la tenemos con menos ropa y un día le pilló el gusto a eso de sacarse el pañal solita, que da mucho calor (jugando, se lo enseñé yo un día). Al principio pedía pañal para hacer pipí y se lo respetamos poniéndole uno cuando lo solicitaba. Un día sola se sentó en el orinal y nos dijo «¡mira! ¡hací pipí en el orinal!!». Asi que empezó a no querer pañal durante el día. Pero lo pedía igualmente para hacer caca. Hasta que un día se sentó solita en el orinal siempre a su disposición, mientras estaba con su abuela liada con la comida y sin decir ni mu dijo «¡¡hací pupu!!» (aunque eso ya se olía a leguas, jejeje).
Tiene escapes, accidentes. Si salimos de paseo a la tarde y se nos hace de noche (con el cansancio) deja de controlar bien y volvemos al pañal. Las noches aún con pañal. Pero vemos un progreso enorme en cuestión de dos semanas que empezó jugando a quitarse el pañal y ahora salimos con la meona a la calle sin él (y con la mochila llena de ropa extra). Asi que animo a las familias a no creer que las decisiones tienen que ser tajantes (por ejemplo: «si quito pañal es para siempre»). Todos los aprendizajes son paulatinos y todos aprendemos mejor si disfrutamos del proceso de aprendizaje y el disfrute pasa por sentirse cómodos, sin temores (como reza el post, es facil que en la retirada de pañal empiecen los miedos de los niños y «puede ser peor el remedio que la enfermedad»)… en caso de tener que escolarizar a los peques o meterlos en guarderías, hay sitios en donde no importa si llevan pañales, porque los educadores comprenden que el control de esfínteres no se entrena, sino que se desarrolla con el niño. No es fácil… pero es mas sencillo cuando las cosas se dan por evolución natural.
Saludos!!