Crianza
Cuando te conviertes en madre primeriza, aprendes que la expresión dormir como un bebé es absurda. Los bebés duermen poco, sueñan mucho, tienen el sueño frágil y, lo más importante de todo, no saben conciliar el sueño solos. Sobre este asunto se han escrito decenas de libros y existe una gran controversia sobre los dos métodos dominantes (el doctor Estivill frente al pediatra Carlos González). Dada la importancia del tema, voy a abrir una categoría específica sobre el sueño del bebé. De momento, os dejo con este interesante blog con un punto de vista a medio camino entre Estivill y colecho. ¡Difrutadlo y compartid vuestras opiniones, por favor!
En la foto, Emma echándose una reparadora siesta.

Estoy de acuerdo en que cada niño y su sueño es un mundo. Porque Ian se duerme solo (sobre las 8.30-9.00 cuando noto que tiene sueño, le pongo musica tranquila y su dudu), por el día podemos hacer todo el ruido del mundo, que nada le despierta (hasta que se despierta por si solo). Nos e si esto cambiará.
Álvaro es un niño muy dormilón (tiene a quién salir, jeje) pero tuvo fases (cuando cumplió el mes) que le costaba conciliar el sueño por la noche…pasábamos 1 hora hasta que se dormía! Luego dormía muy bien, pero hasta que lo conseguía lo pasaba mal… Ahora, le cuesta conciliar el sueño por el día así que le cogemos y le acunamos (tenemos una posición a la que llamamos «la infalible»). Por la noche ya lo hace él solito… De todas formas, no somos muy de libros, hacemos un poco lo que nos sale y a lo mejor es una aberración pedagógica, pero el niño crece bien, descansa y se le ve feliz, así que seguiremos así.