Recortes en los Presupuestos Generales del Estado
Era fan de la escuela pública, del instituto público y de la universidad pública. Era, porque ya no lo soy. ¿Podré pagarle a Emma una educación privada? ¿Dejaría de tener más descendencia para centrarme en los costes de su educación? Son preguntas que estos días me rondan la cabeza y que ayer golpeaban mis pensamientos insistentemente. Ya os imaginaréis por dónde van los derroteros de este post, pero situémonos. Una de las cosas que más me sorprendió al llegar al País Vasco fue la alta tasa de enseñanza privada y concertada (alrededor del 50% desde hace una década), cifra que parece inamovible a pesar de que el modelo de enseñanza en euskera ya está totalmente asentado en la enseñanza pública. Dado que la mitad de los padres envían a sus hijos a centros concertados y privados, por lo que desembolsan cuotas mensuales de cuantía variable (desde 30 euros a 600), la otra mitad de padres, entre los que destaca la población inmigrante, la gitana y la autóctona con pocos recursos económicos, optan por la enseñanza pública. Si a ello le añadimos que amén de la crisis económica gestada por las entidades bancarias, con el beneplácito de nuestros sabios gobernantes, nos vamos a quedar con menos profesores, ¿qué nos queda? Guetos en la enseñanza. O dicho de otro modo (del modo en que ellos hablan), habrá más alumnos por aula. Hoy es uno de esos días en los que muerdo. Y para mi sorpresa, en las ediciones digitales de los principales periódicos, este asunto no aparece destacado, ya que los problemas económicos de la filial argentina de Repsol y los traspiés económicos de la casa real, cuyos principales miembros al parecer ayudaron a los turbios negocios de Urdangarin, son más importantes que el futuro del país. Y que conste que también me cago en la monarquía, que sólo padecerá un recorte del 2% en sus presupuestos para 2012.
En la imagen, vía Pinterest, una bucólica aula de escuela.

Mientras leía el post me han venido a la cabeza estas ideas: franceses y guillotina…Pero para uso indiscriminado…jajaja! Vaya vena más sanguinaria que me ha salido!
Ya en serio, nos han arruinado el futuro y han arruinado el de nuestros hijos y lo más gracioso es que no se les cae la cara de vergüenza porque no la tienen y nunca la han tenido, ni escrúpulos para hacer todo lo que están haciendo y encima pretenden que el pueblo llano paguemos por sus errores, malas gestiones, nefastas decisiones…mientras tanto, ellos se aseguran su jubilación y la de sus familiares y amigos. En cambio seguramente que todos tenemos a alguien cercano sino es nosotros mismos, a los que han despedido con indemnizaciones irrisorias, que cobran sueldos miserables, con condiciones laborales precarias o viviendo un largo etcétera de situaciones injustas. Miedo me da el día que salgamos todos a la calle y digamos basta, que hasta aquí hemos llegado (porque yo estoy convencida de que reventaremos, o no?).
No sé, cada día tengo más dudas (acerca de todo y todos). La única certeza que tengo es que las generaciones anteriores nos han dejado una herencia nefasta y no quiero que la nuestra repita modus operandi. ¡Ay!
No sabía que la situación fuera así en el País Vasco. En Valladolid, ciudad con tradición conservadora, los colegios privados de «toute la vie» (Maristas, La Salle, blablabla) son los más solicitados con diferencia, y la pública es menos elegida. Pero aún así, hay muy muy buenos colegios e institutos públicos. Buenos en nivel y buenos en calidad de la enseñanza. Mis alumnos vienen de todas partes, tengo hijos de profesores de universidad, obreros, dueños de bodega de Ribera de Duero.. Son buenos chicos, estudian más o menos y sí, tengo inmigrantes, chicos con muchos problemas sociales, etc. Pero todos están en la misma clase, se relacionan y aprenden a convivir. El día de mañana estoy convencida de que todos ellos serán buenísimos profesionales y personas, y yo me sentiré orgullosa de haber contribuido en su educación. Y sí, todos estudian y han estudiado en la pública (y en varios colegios, no sólo en uno).
Estoy convencida de que también existen buenos centros concertados, pero no tienen ABSOLUTAMENTE nada que envidiar a los buenos centros públicos.
Creo también que hay mucha desinformación sobre el funcionamiento de la escuela concertada. Paso a enumerar algunos «falsos mitos»:
1º «En la concertada se elige a los alumnos». ¡¡Mentira!! El criterio de admisión de los alumnos en las enseñanzas concertadas es exactamente el mismo que en la pública. De esta forma, si un alumno inmigrante, gitano, etc, solicita como primera opción un centro concertado y tiene más puntos que el resto, será admitido, aunque el colegio no quiera. Y si queréis comprobadlo, id a cualquier centro concertado de barrios conflictivos y veréis qué tipo de alumnado hay.
2º «Los cambios sólo afectan a la pública». ¡Otra mentira! La ratio de alumnos, por ejemplo, se fija para todos los centros subvencionados con fondos públicos. Es decir, pública y concertada. Por lo tanto, sí, va a haber más alumnos por aula en la pública, pero también en la concertada.
3º «Los profesores están mejor preparados». Sinceramente, todos los profesores de la concertada que conozco se han presentado alguna vez a las oposiciones y, al no aprobarlas, se han ido a la concertada. Así que, técnicamente, no han sido capaces de aprobar un examen que los de la pública sí que han podido.
Bueno, os he metido una chapa que pa’que jajajaja. Disculpad! Es que el tema me toca la fibra sensible jijijiji.
Uy, de chapa nada de nada. No sabía que los cambios de ratio también afectan a la concertada (las ikastolas son concertadas). Sí, lo del País Vasco es muy curioso. Entre colegios religiosos (jesuitas, maristas, Opus, etc.), ikastolas, internacionales (el liceo francés, el alemán, etc.) y los que tienen alcurnia, el asunto es realmente complicado. Sobre todo, en las ciudades y, más concretamente, en los cascos antiguos (como es nuestro caso). A mi marido el tema le produce estupefacción, ya que él fue a la misma escuela pública que los hijos del ex futbolista Bernd Schuster. ¿Te imaginas a los hijos de Guti, Alonso y Ronaldo a la pública? ¡Je! ¡Yo no! Y ahora sí que apago el ordenador y me voy a dormir… ¡Buenas noches!
Puf, pues no sé qué decirte! Yo no me fiaría del criterio de elección de centro de Guti XDDDDD
Por cierto, una última observación, los liceos, son colegios públicos pero de su país. Para mí, la mejor opción si quieres que tu hijo aprenda un 2º idioma (y su sus padres son castellano-parlantes jeje). En Valladolid hay un liceo francés, que casi no tiene gente porque no tiene la «fama» ni la «alcurnia» de los maristas, jesuitas y demás. Yo me estoy planteando seriamente si llevar a Álvaro para que aprenda francés….. No sé, no sé.
Ocurre lo mismo con el colegio alemán, que aquí tiene una fama enorme y que sigue el currículum de la escuela pública alemana. ¿El problema? Es carísimo. Ahora bien, los ex alumnos que ha conocido mi chico hablan perfectamente alemán…
¡Cuántas dudas! El año que viene, porque en el País Vasco se elige escuela cuando el bebé todavía no ha cumplido dos años, veremos qué hacemos. ¡Muas!
Ana… Yo te animo a que lleves a Alvaro al francés…. hehe…. Efectivamente, los colegios tipo Liceo Francés son una excelente opción para aprender un segundo idioma gracias a una escolaridad y un método plenamente en ese idioma y que después es un trampolín perfecto para continuar con el inglés. Lo digo por experiencia propia y puede que suene muy chovinista de mi parte y lo digo sin conocer muy bien la enseñanza en España, pero la calidad de la enseñanza en Francia es para mí, excelente (aunque cada vez más los políticos quieren acabar con ella). El problema de los Liceos Franceses en el extranjero : el precio. Lo cuál me pone los pelos de punta. Obviamente como francesa, a mi me gustaría mucho que Xabi fuera al de Bilbao para que cuando sea bachiller pueda escoger entre estudiar aquí o allí.