Pan recién hecho en casa
Os presento a mi nueva amiga la panificadora. Comprada recientemente en Lidl, amasa que da gusto y hornea un pan francamente delicioso. Este es el primero que he podido fotografiar, ya que los anteriores han volado. Sobre todo la pizza monkey bread del fantástico blog Kanela y Limón. Madre mía, no tengo palabras para describir lo sabroso que estaba (harina, miel, leche, puré de patatas, aceite, etc. con relleno de sobrasada, tomates cherry horneados con aceitunas negras y jamón y queso). Voy a aprovechar este post para contaros que una de las cosas positivas que tiene el emparejarte con una persona de otra nacionalidad es que, pasado un tiempo, acabas descubriendo que algunas de las cosas que tú considerabas como verdades absolutas en realidad no lo son. Hace unos años pensaba que el pan que comía era el mejor. Sin embargo, la valoración de mi marido germanoide era absolutamente diferente (y parecida a la que tiene de la mantequilla que ingerimos): «Es aire que no alimenta y al día siguiente se convierte en goma». Durante cierto tiempo me resistí a darle la razón, aunque estaba de acuerdo en lo de la goma. Pero maldita sea, he de reconocer que hay muchas más harinas que la de trigo blanca y que, además de agua y aceite, un buen pan puede contener otros ingredientes. ¿Queréis saber cuál será la receta de mañana? Pan de leche (sin lactosa) y chocolate. Mhhhh!!!!
En la imagen, mi querida panificadora y el pan de 750 gramos de harina de trigo y centeno cocinado hoy. Por cierto, el exquisito paladar alemanoide de maridín ha dado el visto bueno a cada receta salida de este maravilloso aparato. A ver qué pasa mañana con el pan dulce…

Que envidia me has dado Gessami! Con lo que me gusta a mi el pan, todavia estoy salivando. Ademas, coincido con tu marido, supongo que a raiz de mis periplos germano-holandeses. Y es facil hacerlo una vez tienes el aparato? Y requiere mucho tiempo? Creo que ya tengo nueva necesidad 🙂 Gracias por la idea! Me encanta!
Durante varios años contuve esa compra porque dudaba sobre si merecía la pena la inversión (50 euros) y si se iba a acabar como un aparato-florero sin uso. Pero después de un par de semanas, te invito a comprarte una ya que es un aparato para patanes (¡bien!). A pesar de que el amasado, levado y horneado requiere mucho tiempo (unas tres horas), la preparación te lleva entre dos y cinco minutos. Lo único que da pereza es planificar la lista de la compra porque a veces las recetas piden harinas muy concretas, pero al alcance de cualquier supermercado austriáco… Además, también existen unos preparados de harina para patanes (¡bien otra vez!) como el que utilicé para el pan de la foto, que os aseguro que está rico, rico!!!
Hola!! He llegado aquí a través del comentario que dejaste en mi blog… y qué casualidad, justo ayer unos amigos nos regalaron una panificadora como regalo de boda! Ya hemos hecho un brioche, de momento estamos encantados. Aunque como hemos recibido muchos regalitos para la cocina tengo que buscar sitio para todo en los armarios!
Las invito a visitar mi página para que vean nuevas recetas, pueden descargar manuales de las máquinas y recetarios. También tengo una página en facebook https://www.facebook.com/mimaquinadepan espero les sirva.
Saludos!
Cecilia