Estrategias de comunicación
Emma tiende a mentir cuando quiere algo que sabe que de buenas a primeras les diremos que no. O por otros motivos, como dar la respuesta que los adultos queremos escuchar. Pero soy fan de la verdad y de fomentar una relación de plena confianza, así que cuando intuyo que la respuesta de Emma no es honesta le pregunto con una sonrisa: «¿Eso es verdad o mentira?». Y ella responde con la verdad; a veces dice que «mentira» con cara de pilla, otras que «verdad» con aplomo. Esta estrategia de comunicación no sólo la uso cuando intuyo que hay una mentira enmascarada, sino también cuando creo que ha dicho la verdad y quiero practicar la técnica, para que sus respuestas puedan ser algunas veces «verdad». A nosotras nos funciona. No es un recurso que lo haya sacado de un blog, ni de un manual de crianza ni nada de nada. Supongo que cada padre busca y crea sus propias estrategias para el día a día y la interminable negociación con una fiera de dos años. Por eso me gustaría saber cuáles son vuestras estrategias de comunicación. ¿Cómo conseguís entablar una conversación sincera con vuestros hijos? Esos renacuajos todavía no tienen los suficientes recursos para hablar apropiadamente, pero sí se pueden comunicar bastante bien con nuestra ayuda, ¿verdad?
En la imagen, de la fotógrafa Julie Ansiau, unas baladas en diagonal que me fascinan.

Pues yo uso una táctica prácticamente igual y es que hay que ver de que manera solo con la mirada somos capaces de comunicarnos con nuestros hijos, y ellos capaces de entendernos con lo pequeños que son, yo si veo que la respuesta es «dudosa» con decirles, pero dime la verdad… me complacen haciéndolo. Que inteligentes son…
A Mario no le he pillado mintiendo casi nunca, así que me apunto el truco para cuando empiece… Pero sí que notamos que se frustraba (y se ponía insoportable) cuando no le comprendíamos, así que hemos insistido mucho en que sepa decirnos cómo se siente. Empezamos por lo básico: feliz, triste, enfadado, me duele, cansado. Y poco a poco hemos añadido más: aburrido, nervioso. ¿Cómo? Pues diciéndole cómo estábamos nosotros en situaciones sencillas de entender, diciéndole cómo creíamos que estaba él, viendo dibujos animados sencillos e identificando esos sentimientos, con cuentos, etc. Y parece mentira lo que nos ha ayudado, porque la comunicación se ha vuelto más fácil desde que puede decirnos desde el principio lo que le pasa. Y como tú dices, ha sido más bien observando y por intuición, estas cosas nadie te las explica ¿verdad?